Encontrar tu nicho de mercado, cuando eres un especialista en odontología, es una tarea complicada, ya que no solo tendrás que enfocarlo de una manera personal, sino también a través de un estudio de mercado para determinar cuáles son las necesidades que hay.

En un campo tan complejo como es la odontología, es imposible abarcar todas las áreas a la perfección; sin embargo, los pacientes buscan especialistas en aspectos concretos en quienes confiar.

Pero ¿cómo saber cuál podría ser tu nicho de mercado?

La primera pregunta que deberías hacerte es qué es lo que más te gusta hacer en el campo de la odontología. No es tan fácil como parece y, quizás, debas dedicarle un tiempo a reflexionar sobre el tema antes de ser claro contigo mismo.

Lo ideal sería fijarse en aspectos que afectan a muchos pacientes, pero esto no tiene por qué ser esencial. La clave del éxito de patologías con pocos usuarios es que generan una gran lealtad y, durante años, no vas a tener que preocuparte por la falta de citas.

Cuando por fin descubras qué es lo que te apetece hacer —o mejor se te da— y lo lleves a la práctica, de forma automática estarás creando una marca personal que te va a diferenciar claramente de tu competencia. No dudes en usar tu nombre y tu apellido como marca corporativa.

Hacer publicidad on line o en las redes sociales es bastante fácil, lo difícil es convencer al cliente. Lo importante es saber darle las razones que despierten su confianza y, sobre todo, no olvidar que tu consulta debe reflejar exactamente lo que estás prometiendo.

La clave del éxito: la confianza

Hoy en día, la mayoría de la gente busca un servicio de dentista específico a través de Internet. Tu forma de publicitarte usando redes sociales, vídeos o contenidos es muy importante a la hora de conseguir clientes. Es más, puedes ser un gran profesional y muy especializado pero también has de saber transmitir a los pacientes que eres la mejor opción para ellos.

Una muy buena técnica para generar esa confianza es animar a antiguos clientes a que publiquen su experiencia contigo. Esto es un arma de doble filo, porque corres el riesgo de recibir críticas negativas o falsas. En cualquier caso, denota transparencia y, por tanto, despierta confianza.

No dejar de aprender

Para ser el mejor dentista especializado no debes dejar de aprender nunca, incluso aunque ya tengas una cartera consolidada de clientes. Los avances en la medicina bucal son rápidos e infinitos y, si no te formas continuamente, corres el riesgo de perder ese nicho de mercado que con tanto trabajo has conseguido.

Los libros, conferencias y cursos te ayudarán, pero, sobre todo, el contacto con otros profesionales (conocido como networking). Permanece siempre tras la pista de soluciones innovadoras o nuevas problemáticas para abordar.

En definitiva, encontrar un nicho de mercado rentable en el mundo de la odontología pasa por diferenciarte y no dejar nunca de aprender. Además, y muy importante, debes saber transmitir a tus futuros pacientes confianza, transparencia y seriedad. De hecho, una de las ventajas de la especialización es que genera pacientes fieles.